Ha pasado mucho tiempo desde que el Athletic gano su última final de Copa del Rey (Athletic 1 - Barcelona 0, Santiago Bernabeu Madrid), esta noche en un partido perfecto nos hemos ganado con creces estar en la final del 13 de Mayo en Valencia.
Este equipo donde hay jugadores que no habían nacido en 1984, ha conseguido que a miles de aficionados se nos humedezcan los ojos, que el corazón nos haya vibrado como nunca, y nos han hecho recordar aquella final contra el Barcelona de Maradona.
Enfrente teníamos al Sevilla, ese equipo donde sus jugadores horas previas al partido declaraban "en peores ambientes hemos jugado...", "la afición no juega...", "hemos jugado muchas finales y estamos muy acostumbrados...", etc, pues bien, más de uno no va a poder olvidar lo que ha sentido hoy sobre el césped de La Catedral.
San Mames y su afición no son comparables a nada.
Mención a parte tienen las poco reflexionadas declaraciones del presidente del Sevilla antes de la semifinal, "nos vamos a comer al León desde la melena hasta la cola", "ningún vasco duerme tranquilo sabiendo que juega Kanouté", aunque para mi lo peor es la falta de respeto hacia uno de nuestros jugadores, "que juegue Llorente, no me preocupa para nada".
Solo un apunte para la final, en el 84 Maradona era el mejor jugador del mundo, 25 años después Messi parece ser su sucesor, y el Athletic se vuelve a cruzar en su camino...
